Como todo tratamiento estético, las carillas dentales también tienen un tiempo de vida. Con el paso de los años, estas también pueden envejecer y necesitarán un recambio.
¿Cuánto duran las carillas dentales?
Las carillas de composite o resina compuesta tienen una duración de entre 5 y 7 años. Para alargar su vida es importante que el paciente tenga una excelente higiene, acudir a sus revisiones anuales, no fumar y no morder alimentos duros o pegajosos.
Por su lado, las carillas de porcelana o carillas cerámicas, al ser más resistentes y duraderas, tiene una vida media de 15 a 20 años. Son carillas que solo necesitan un mantenimiento similar al de los dientes naturales.
¿Qué tipo de carillas elegir?
Recambio de carillas de composite
Hay pacientes que ya llevan carillas de composite y, cuando notan que ya están envejecidas, deciden renovarlas con un diseño diferente, más bonito y con una tonalidad más o menos blanca. Por lo general son pacientes jóvenes que buscan un tratamiento rápido, reversible y más económico.
Del composite a la porcelana
Pero también están los pacientes que prefieren un tratamiento más definitivo, unas carillas más fuertes y resistentes a las tinciones o que requieren de menos mantenimiento, un tratamiento que les pueda durar decenas de años: las carillas de porcelana. Para ello, el odontólogo retirará las carillas de composite, le realizará un nuevo diseño de sonrisa, una prueba de mock up para probar el diseño y finalmente cementar las carillas.
Por último, también están los pacientes que llevan carillas de porcelana y después de mucho tiempo deciden cambiarse por otras de mejor calidad y estética. La ventaja en este caso es que un nuevo tratamiento les puede ofrecer una sonrisa con mayor personalidad y naturalidad.